Este país de prados verdes, bosques y lagos majestuosos, que acoge castillos medievales (Lastours y Saissac) e impresionantes cuevas (gofre de Cabrespine, Limousis), la Montaña Negra (Montagne Noire) y su punto culminante, el pico de Nore (1210 m), está rodeado de numerosas rutas de senderismo.
Carcassonnais, Lauragais
El «Village du Livre», Montolieu, con sus libreros y sus exposiciones de arte contemporáneo, merece sin duda una visita, además de Caunes Minervois, un pueblo de mármol rojo con palacetes de estilo renacentista.
Carcasona es sin duda una parada obligatoria para todo aquel que visita Aude. La Cité médiévale , perfectamente conservada, es imprescindible para los visitantes de todo el mundo, sobre todo desde que se clasificó como Patrimonio Mundial de la UNESCO. La Bastida Saint Louis, ciudad baja de Carcasona, también merece el desvío por sus palacetes, iglesias, capillas y el puerto del Canal du Midi.
El canal du Midi,, también clasificado como Patrimonio Mundial de la UNESCO, conecta Carcassonnais y Lauragais y se puede recorrer en gabarra.
Lauragais audois
Lauragais, que da a la región de Toulouse al oeste, es un país de laderas y molinos de viento. Lauragais, el verdadero «Pays de Cocagne», cuenta con campos de trigo y de girasoles, viejos castillos renacentistas y numerosos vestigios con una riqueza pasada.
Castelnaudary capital de este territorio tan atractivo, es famosa por su cassoulet, una gran tradición ancestral que se celebra y se degusta. Os invitamos a recorrer la ruta del Cassoulet de Castelnaudary para descubrir la abadía románica de Saint-Papoul, la ciudadela medieval de Fanjeaux, el Seuil de Naurouze, el macizo de la Malepère y sus viñedos.
País de Cucaña
Lauragais es el país de Cucaña, ¡el verdadero! Esta rica tierra fue la riqueza de numerosas familias de Languedoc y Toulouse en el Renacimiento, gracias a la cultura del pastel. Las hojas secas de esta planta, trituradas en una bola, proporcionan una tinta azul única que se utilizaba en toda Europa. Esta simple bola de hojas, conocida como «caucanha» en occitano, «cucaña» en español, es la que da su nombre al país. El país de Cucaña es el país de la abundancia y del buen vivir...